jueves, 17 de mayo de 2012

Flan de Caricias



En instantes como este, uno tendría que tener muy claro cómo empezar a escribir y cómo empezar a desgranar los pensamientos que en la cabeza se le alborotan como si de un conjunto de sentires se agolparan. Para mí lo escrito es importante -mucho- y sin embargo soy consciente en apenas cinco líneas, que posiblemente no sepa plasmar todo lo que mi corazón quiere decir en este momento.

Por una vez y sin que sirva de precedente seré convencional, y empezaré agradeciendo, pero pese a todos los convencionalismos, presentes, futuros e incluso estratosféricos, quiero dejar claro, que me abandono a lo que mi corazón quiera decir, en un AHORA como  instante.

Sí abuela, entendí tu abrazo, entendí tus lágrimas, entendí todo lo que tus ojos plenos de alegría significaban en ese instante, sentí en tu abrazo esas tardes de miradas, la banda de música de Valderrobres; y entró en mi corazón como en el tuyo ese clarinete que nos acompaña cada instante ese recuerdo que para ti para mí y para todos se hace presente con añoranza y también con alegría.

  iaia, también sentí  tus lágrimas de alegría, tu primer viaje fuera de esa península, en la que  tan grande eres como grande es tu generación, con forjas de carácter y plenitud de gallardía, tú que desde tu sencillez un día colocaste en mi vida al gran Miguel Hernández, solo por eso y por tanto amor, solo puedo quererte tanto como te quiero.

Sí tía Reme, te debemos tanto, que solo podemos pagarte con aquello que nos hace felices junto a ti, que es quererte, siempre hemos sabido que el niño de tus ojos peina canas y que a pesar del paso de los años, tiene que llamarte cuando vuelve de viaje, porque no puedes dormir, hasta que sabes de su regreso.

Pilarín me pones de los nervios, siempre dices que tenemos el mismo carácter y siempre chocamos, pero no te cambiaría por nada en el mundo, siempre sé que eres esa amiga con la que puedo contar cuando hay que hacer algo grande, como decir como es uno en realidad y siempre estás ahí como ese gran ordenador que todo lo controla, pero para que todos tengan lo que necesitan, solo espero que te des cuenta que nos hacemos mayores y que tú has sido la mejor en tu faceta, ahora nos toca el concierto más importante de nuestras vidas, hemos vencido a Febrero y te garantizo, que tendré lista mi caja de luz y estaré a tu lado no lo dudes.

Mi gran lectora, la de los silencios cuando al pasar de los folios esbozas emociones, la de la luz de la habitación siempre encendida para leer una y otra vez aquello que suma el conjunto de mis pobres letras, y desde hace una año París nos une tanto que esta cercanía tan nuestra me hace enormemente feliz, y nuestros momentos en  las librerías  de  Rue Jacob. Aunque cada encuentro en el pasillo siga siendo ese choque de titanes entre los siguientes de la lista. Pero me gusta mirarte. Mirarte cuando lees, cuando miras al cielo, cuando piensas en todo lo que nosotros no pensamos, cuando decides y no decides hacer una cosa, cuando tus lágrimas resbalan por el paisaje de tu rostro al escuchar una nota que entra como una gota de rocío en el bosque de tu alma. Si porque tu piel evoca calma, porque tu nombre es nieve y caliza tus manos son dichosa penumbra y sobre todo tú eres una razón importante para escribir, para que un violín no se canse de batir sueños.

Quizás escribo esto porque estoy leyendo a Espido Freire y por eso quiero escribir de sentimientos, de caricias, de vosotras, no tiene sentido o tal vez sí que lo tenga, pero muchas veces los sentidos son ese parpadeo que en un fugaz segundo, te lleva a una sonrisa al recordar aquello que es tu vida, aquellos que hacen tu vida feliz.

Me enfado cuando los demás no entienden estás cosas, y no debo hacerlo, porque los demás son eso “los demás” tan imperfectos como nosotros, tan maravillosos como nosotros, y por eso son los demás aunque una vez entran en tu corazón ya no son exactamente los demás.

Y tendría que ampliar el horizonte de esta voz alta hacia vosotras, pero no puedo, tal vez no deba, porque a quien recuerdo sigue sin ordenar sus pensamientos y la obsesión mata, la obsesión rompe las cuerdas del violín. Añoró la pintura, las enigmáticas charlas los aromas de linaza y carbón, de acrílico y lienzo, pero no debo, no puedo, solo espero que algún día, pueda volver a contemplar ese retrato, el más bello retrato que jamás me han pintado y que jamás me pintarán.

8 comentarios:

  1. Nadie puede imaginar, que detrás de estas líneas hay infinitamente más, hay mucho por leer, porque en ocasines la gente se queda con las líneas públicas, pero luego está lo interior, lo que se escribe en folios y no uno en ocasiones ochenta incluso los hay que sobrepasan los cien.

    Yo he tenido esa suerte conocer mucho más que estas líneas, y eso me hace muy feliz.

    Besos Dídac

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    1. En casi todas las cosas, siempre hay más, en una partitura sobresale la melodía principal y luego hay acordes que hacen que esa melodía sea bella.

      Yo he tenido suerte de tenerte cerca. Besos Blanca

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  2. Un texto que se cincela en lo profundo de las cuerdas del violín de un alma sensible, este es el Dídac intimista, el de los sentimientos, el expresivo, de nuevo el encantador por su corazón de notas ilimitadas.

    Me alegra que esos sentimientos se escriban, que sean en líneas de sencillez, porque seguro que esto es el estracto de algo más intenso y de mayor tamaño.

    Un gran abrazo a ese interior de maravillosa armonía.

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    1. La expresividad forma parte de nosotros como el respirar, es un sentir, pero sobre todo debemos saber que no siempre lo expresivo es brillante, en muchas ocasiones lo expresivo es simplemente de uno, para compartir una pequeña parte de ese yo.

      Es mucho más tamaño, como tu corazón enorme. Muchos besos.

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  3. les femmes et les sentiments. C'est fantastique

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    1. Nous, sentiments, nous et eux. Je pense que vous êtes fantastique

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  4. Como tú sueles decir, la importancia de los sentires no se cuestiona. Este es el fragmento más "convencional" pero todo el texto los que tenemos la suerte de conocerlo está lleno de una poética cuya fragancia envuelve.

    Como siempre la musicalidad es una nota "marca de la casa" y eso hace que te sumerjas en los ritmos con tranquilidad, ni que decir tiene que compartimos esos sentires y me felicito por tu forma de darles palabra.

    Como siempre fuerza y sensualidad Dídac y muchos besos!

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  5. Los sentimientos son el sosiego frente a la histeria, frente al no parar, le ganamos la partida a Febrero, espero que Junio no acabe con mi equilibrio, pondré más sentimientos al servicio de las cosas que quiero. Lo prometo.

    Muchos besos Marcos.

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